Muchas amas de casa aprecian la pechuga de pollo por su rápida preparación, y por la infinidad de recetas que se pueden preparar a base de la misma. Lo cierto es que este producto es un alimento muy nutritivo, rico en proteínas, y con un mínimo de grasas en la carne. Y si a eso le sumas su amplia disponibilidad en el mercado, y sus económicos precios… ¡Pero, ojo, no todo es color de rosa!
La pechuga de pollo dietética, de esas que se muestran en los anuncios publicitarios, puede ser muy peligrosa para la salud. Por lo tanto, ¿Cómo distinguir un producto de calidad del que es obviamente dañino? ¡Qué pasada! conoce un truco, y hoy lo va compartir contigo…
La pechuga de pollo adecuada
Lo primero es mirar detenidamente el pollo que se va a comprar. ¡Si observas líneas blancas, en cualquier caso, no lo tomes! Estas rayas blancas indican que el pollo estaba creciendo demasiado rápido, y su tejido adiposo se fue desarrollando de manera desigual. Dicha carne contiene grasas y aditivos nocivos, y, por desgracia, puede ser no sólo de mal gusto, sino también muy perjudicial para la salud.
Algunas estadísticas: aproximadamente el 90% de la carne de pollo que está en venta, proviene de la cría intensiva en granjas especializadas. ¡Allí, los pollos de engorde son alimentados con antibióticos y hormonas, y, como resultado, alcanzan el tamaño de un ave adulta en solo mes y medio, o sea, 4 veces más rápido de lo normal!
¿Te imaginas cuántas sustancias dañinas están entrando a tu cuerpo por esta vía? ¡Dicha carne es puro veneno! Por otra parte, el uso constante de la parrilla para preparar la pechuga tampoco es sano, y puede dañarte el hígado y los riñones, así como contribuir a la obesidad.
La regla principal: comprar carne fresca y de alta calidad. Una vez seleccionada la pechuga de pollo correcta, entonces sí es momento de preparar una delicia culinaria. Puedes experimentar con pechuga empapada en leche o yogur, antes de cocinarla al vino, con salsa de soja, o incluso con agua de soda. Las opciones son miles…
Recuerda: ¡Solo vale comprar un producto sano, así protegerás tu salud! Asegúrate de compartir estos consejos con tus amigos…
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