La cesárea está llena de mitos. Para algunas mujeres, esta incisión en el abdomen es la forma de «escapar» del dolor innecesario, las contracciones, las lágrimas, el estrés del parto… Para ellas, es una «opción para dar a luz, y vivir felices para siempre».
No obstante, en algunos países, esta forma quirúrgica de parto no es una opción elegible por la futura mamá, sino una necesidad, a decisión del médico, solo si estuviera en peligro la salud/vida de la madre o el feto…
Sin embargo, si piensas que la cesárea es la solución perfecta, deberías saber que este método invisible no es tan perfecto como parece. Recientemente, la fashion blogger australiana, y madre de dos hermosas niñas, Olivia White, reveló en sus redes sociales de Facebook e Instagram, una foto, tomada justo después del nacimiento de su hija menor.
En ella, se pueden ver las múltiples cicatrices de la cesárea. Para complementar la publicación, adjuntamos las historias de otras mujeres, testigos de la dura realidad de tener hijos por este método.
«Para aquellas que piensan que dar a luz por cesárea es fácil, traten de imaginar lo que es tener una herida de 6 pulgadas en el abdomen. Es como si le abrieran las entrañas a un tiburón, que se ha comido a un surfista, y lo cerraran con hilo de pescar. Pero, esta vez, sus órganos internos están tratando de escapar».
En su página, Olivia, constantemente, comparte con sus suscriptores muchas encantadoras imágenes sobre la maternidad.
Cada foto está llena de amor y ternura.
¡La maternidad es una recompensa por el valor!
Olivia no es la primera mujer que se atrevió a exponer en la red una foto de su abdomen, después de una cesárea. Por ejemplo, anteriormente, algunas madres de Nueva York participaron en el proyecto HuffPost Parents, mostrando sus cicatrices ante la cámara, y compartiendo sus historias.
He aquí la huella de Mary, de 41 años de edad, quien, tras tres años de intentar concebir a su segundo hijo, y sufrir dos abortos involuntarios en ese tiempo, finalmente lo logró. La cesárea fue la única manera…
Jody, de 42 años de edad, por orden de los médicos, desde la 26ª semana de embarazo tuvo que guardar cama, por un trastorno en el cuello del útero. Ella ama a su cicatriz, porque es una prueba directa de que sus hijos siempre estarán con ella.
A sus 27 años de edad, Susan intentó dar a luz de forma natural, pero, después de 15 horas inútiles y muy dolorosas, los médicos decidieron una cesárea. Han pasado 5 años, pero la cicatriz le recuerda ese día.
Molly, de 37 años de edad, dice que, durante el parto, el ritmo cardíaco de su bebé comenzó a caer, por lo que la única opción fue una cesárea.
Mariel no esperaba someterse a una cesárea, pero reaccionó a ella con calma, ya que, después de 12 horas de contracciones, su útero se negaba a ceder.
Caroline nació con glaucoma, por lo que, desde los primeros días de embarazo, sabía que tendría que dar a luz por cesárea, y lo tomó con mucha calma.
Como has podido ver, muchas mujeres han pasado por una cesárea, y están dispuestas a compartirlo en la web. Solo recuerda: Esta manera de dar a luz, como cualquier otra operación quirúrgica, no está exenta de riesgos, motivo por el cual no hay que tomársela a la ligera. Además, puede que después, el bikini ya no te luzca igual…
De cualquier manera, si ya tienes la cicatriz, nunca te avergüences de ella. Después de todo, sin ella nunca habrías podido disfrutar del mejor y más bello regalo del mundo: ¡Tu bebé!
Si estás de acuerdo con esta opinión, comparte el artículo en tus redes sociales, en homenaje a todas las madres que han dado a luz por cesárea…
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