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«Vagina dentada»

En Sudáfrica, han decidido hacer frente a los violadores. ESTO no lo desearás ni a un enemigo…

Cuando las leyes no funcionan, al rescate viene el ingenio humano. ¿Cómo castigarías a la persona que comete un delito, pero que suele salirse con la suya? Al final, resulta que hay método eficiente y audaz. Le puede parecer cruel a alguien, ¡pero, la verdad es que es muy funcional! Como se dice, el fuego se combate con fuego…

Las medidas extremas fueron aplicadas en Sudáfrica, donde se mantiene alarmante un grave problema de violación. Según datos extra oficiales, cada año, cientos de miles de niñas y mujeres sufren el acoso sexual. ¡Con un problema de tal magnitud, no hay policía que pueda hacer frente!

Un día, Sonnet Ehlers, la doctora sudafricana, durante su guardia en el hospital, atendía a una víctima de violación. Las palabras de la muchacha le llegaron hasta lo profundo del corazón: «Si hubiera tenido unos dientes ahí abajo…» Pasó el tiempo, y finalmente salió a la luz un preservativo «con dientes» – una nueva arma para evitar violaciones.

Se trata de un cartucho de látex especial que se inserta en la vagina. En el interior de este dispositivo, se ubican unos dientes-ganchos, que se insertan en el pene del violador, causando un dolor terrible.

Quitar este artefacto por sí mismo es extremadamente difícil – se requiere un equipo médico, y donde hay médicos, allí está la policía. En cualquier caso, mientras que el delincuente se ocupe de su «herramienta», la víctima tendrá tiempo para escapar.

La inventora de la «vagina dentada» centra la atención en el hecho de que el dispositivo representa no sólo protección, sino también una función educativa. El violador debe pasar por el dolor que sufre una mujer, victima de violación. Sólo entonces, habrá un verdadero castigo a los actos maliciosos.

Todo pudiera parecer lógico, pero hay que reconocer que la invención ha generado una gran cantidad de comentarios negativos en el ámbito profesional. Los expertos opinan que este método sólo endurecerá la reacción de los malhechores, y la situación final empeorará.

Y tú, ¿qué opinas? ¿Merece la pena abastecer a las chicas con los dispositivos similares, o hay que buscar otras maneras de influir sobre los responsables?

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