Tarde o temprano, a muchos amantes de la cocina se les despierta el deseo de mostrarle al mundo sus dotes culinarias. Para ello, preparan un plato, con la idea de hacer que los demás jadeen (aunque sea por fotos), fotos que no dudan en divulgar por las redes sociales. Sin embargo, sus deseos no siempre coinciden con sus verdaderos talentos artísticos.
Es divertido burlarse de tu propio fracaso con tus amigos, pero cuando el esfuerzo culinario te da una torta terrible, en una celebración importante, podrías llegar a llorar. Al menos, así les pasó a nuestros protagonistas de hoy…
Incidentes en la cocina
- Aunque las flores son hermosas, y no son de masillas, igual se pegan en los dientes.
- Esperamos que, por otro lado, este pastel se vea como un gatico, u otro animal lindo…
- La visión lánguida de Picazo es fascinante.
- A la torta. ¡Corramos!
- ¿Una albóndiga de pescado? ¿Hablas en serio?
- Sin lágrimas de niña, no se logra.
- El Pony está deprimido.
- Está claro que Harry Potter no es un pastel… Siento reconocer a la estrella en la primera foto.
- El muñeco de nieve, Olaf, se derritió.
- No, esto no es crema agria roja, sino el héroe de un famoso dibujo animado…
- Habría sido más o menos tolerable, pero la mandíbula para el erizo era una idea súper pensada.
- El tartamudo dejó a la amante. Está tan enojado el tartamudo.
- ¡Atención! Parece que hemos conseguido encontrar el dispositivo con el que se crearon estas obras maestras.
- Cuando algo salió mal…
- Esperamos que las manchas marrones en la torta sean rastros de las patas de unas lindas mariposas.
Dejando a un lado las risas y las lágrimas, quisiera desearles a todos, que sus platos nunca caigan en tales colecciones. ¡A veces, es mejor no experimentar! Si te divertiste con estos fallidos intentos de impresionar en la cocina, compártelos con tus amigos de las redes sociales…
Deje su opiñón sobre la publicación