Muy a menudo, cuando escuchamos hablar de la vida de muchas estrellas de Hollywood, casi todo gira en torno a los numerosos divorcios en las altas esferas de la industria. No es un secreto que resulta extremadamente difícil para las celebridades vivir un «felices para siempre» bajo tanta presión. Pero siempre hay raras excepciones, y John Travolta y Kelly Preston han sido una de ellas. Desafortunadamente, también les tocó tener que separarse, mas no porque el amor les abandonó.
Primera relación
Kelly y John se conocieron en 1989 mientras elegían el papel en «The Experts». Ella estaba casada. Más tarde, Preston le contó que no era feliz, pero aún estaba en una relación, por lo que no quería involucrarse con nadie más.
Por supuesto, tales circunstancias complicaron toda la situación, ya que John se enamoró rápidamente de la belleza. Fue extremadamente difícil para ellos conocerse, ya ambos eran figuras públicas, lo que significaba que siempre estaban en la mirilla. Pero eso no detuvo a Travolta.
Boda rápida
John le propuso matrimonio a Kelly en 1991. Fue un shock para todos, porque en ese momento la pareja no llevaba tanto tiempo en una relación oficial. A pesar de todo, Preston estuvo de acuerdo. Eran muy felices. En una entrevista, Preston declaró cuán fuertes eran sus sentimientos. Estaba segura de haberse enamorado de Travolta a primera vista.
Durante la boda, Kelly ya estaba embarazada de su primogénito, Jett, y en 2000, la bella actriz le dio a su esposo una hija, a quien nombraron Ella Blue. La pareja siempre trató de apoyar a sus hijos en todo. Formaban una familia muy alegre y amigable.
John Travolta y Kelly Preston: juntos contra los golpes del destino
En 2009, la familia tuvo que hacer frente a una gran pérdida. Mientras estaba de vacaciones en las Bahamas, su hijo Jett, quien padecía La enfermedad de Kawasaki, se golpeó la cabeza con el borde de la bañera, y no pudo salvarse. Los cónyuges se apoyaron mutuamente lo mejor que pudieron, pero fue como si apareciera un agujero negro en su familia, que absorbió todas las emociones positivas.
Su tercer hijo, Benjamín, quien naciera un año después de la pérdida, en 2010, fue como un bálsamo para llenar el vacío. Su nacimiento ayudó a John y Kelly a salir del agujero psicológico en que habían caído tras perder a su primogénito. Parecía que todos los problemas quedaron atrás, pero hace poco John sorprendió al público con una publicación en Instagram.
El actor dijo que su amada Kelly perdió la batalla contra el cáncer, y que su corazón dejó de latir el pasado 12 de julio de 2020. Travolta agradeció a los médicos, familiares y amigos que ayudaron a su esposa a combatir la enfermedad. El actor también se disculpó con los fans por no haber dado a conocer nada de él por un tiempo. Ahora solo necesita estar con sus niños, que han perdido recientemente a su madre.
Es sorprendente que incluso en un momento así, Travolta no se haya olvidado de quienes aman su trabajo. Lamentablemente, la historia de amor, que duró unas tres décadas, terminó de manera muy triste. Solo podemos desearle a John y sus hijos la fuerza necesaria para hacer frente al nuevo golpe que le asestó la vida.
Si también creías que la historia de esta pareja de artistas es un ejemplo vivo de un amor incondicional, en homenaje al «Amor» y a la amada de John Travolta, comparte su historia con tus amistades de las redes sociales.
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