Año tras año, el título de «royal con más estilo» recaía alternativamente entre Meghan Markle y Kate Middleton. Pero parece que, aunque hubo una intensa lucha entre las bellezas, una nueva estrella se ha alzado en el firmamento real. Una estrella que ha eclipsado fácilmente a sus predecesoras. Se trata de la favorita del sobrino del Príncipe de Mónaco: Beatrice Borromeo, de 36 años. Te contamos quién es esta nueva icono del estilo que se niega rotundamente a llevar diademas y considera que los vestidos son una pérdida de dinero.
¿Por qué todo el mundo habla de Beatrice Borromeo?
En la clasificación de las bellezas augustas con más estilo irrumpió inesperadamente la esposa del nieto de la famosa Grace Kelly. La aristócrata italiana, que pasó a formar parte de la familia monárquica de Mónaco, llamó la atención por primera vez en 2015. En ese momento, los críticos de moda discutieron en silencio el lacónico, pero locamente romántico vestido de novia de la belleza. Desde entonces, la encantadora mujer con cada nueva salida demuestra que es merecedora del título de icono del estilo.
Nacida con una cuchara de plata en la boca
La familia de Beatrice posee una docena de fincas y residencias repartidas por toda Italia. Los Borromeo son tan influyentes que un pequeño archipiélago del Lago Mayor lleva su nombre. Se trata de las Islas Borromeo. Sus padres son el Conde Don Carlo Ferdinando de Arona y la Condesa Doña Paola Marzotto, y su tío es el antiguo presidente de la casa de modas Valentino. Así que no es de extrañar que el impecable sentido del estilo lo lleve en los genes.
Periodista intrépida
A pesar de su estatus real, la augusta dama sigue dedicada a su trabajo. Borromeo tiene fama de ser una valiente periodista que no teme ni a los políticos más autoritarios en su empeño por sacar a la luz las tramas de corrupción. También ha probado suerte como cineasta, estrenando en 2013 un documental sobre mujeres mafiosas, Mamma Mafia.
Activista de derechos humanos
En 2015, la aristócrata italiana se hizo partícipe de una iniciativa de la ONU llamada «Fashion 4 Development». Quizá el nombre se asocie al mundo de la moda, pero el proyecto perseguía un fin puramente bondadoso. Su misión es salvar a las niñas de los países del Tercer Mundo del matrimonio precoz. Al fin y al cabo, el matrimonio precoz suele tener terribles consecuencias: desde complicaciones durante el embarazo y el parto hasta víctimas mortales.
Antigua modelo
Dueña de una figura esbelta y una belleza exquisita, Beatrice estaba destinada a probar suerte como modelo. Le gustaba posar con trajes a la moda y joyas de gran peso, pero nunca pensó dedicarse a ello profesionalmente. Borromeo siempre soñó con realizarse como periodista que protegiera las voces de los oprimidos.
Se casó con el sobrino del Príncipe de Mónaco
Beatrice conoció a Pierre Casiraghi en 2008, mientras estudiaba en la universidad. Este encuentro fue crucial para el nieto de Grace Kelly: de «príncipe de las fiestas» empedernido pasó a ser un novio ejemplar. Es cierto que no tenía prisa por casarse con la encantadora heredera. Como resultado, la pareja finalmente dio el gran paso sólo después de siete años – en 2015.
Feliz mamá de dos hijos
Dos años después de su boda, el 28 de febrero de 2017, Beatrice y Pierre tuvieron a su primogénito, Stefano Ercole Carlo Casiraghi. Pronto se convirtieron en padres por segunda vez: el 22 de mayo de 2018, la pareja tuvo otro hijo, al que llamaron Francesco Carlo Albert. El hijo mayor de la pareja es el noveno en la línea de sucesión al trono, mientras que el pequeño es el décimo.
Una princesa con un armario modesto
Cuesta creerlo, pero Borromeo prácticamente no tiene vestidos de lujo en su armario. Resulta que alquila looks de lujo para eventos sociales. «No puedo permitirme comprar ropa nueva todo el tiempo», admite. – Trabajo como periodista y mi sueldo es el correspondiente. No quiero malgastar el dinero. Se puede llevar con seguridad ropa del mercado de masas y estar estupenda».
No lleva diademas por una cuestión de principios
Precisamente así respondió a la estilista que le propuso lucir la exquisita pieza de joyería. «Las tiaras me deprimen», se lamentaba Beatrice. Y es comprensible. Al fin y al cabo, a menudo prefiere las imágenes más sencillas posibles: una camiseta, unos vaqueros y unas zapatillas de deporte. ¡No en vano popularmente le llaman «una chica sencilla de la familia real»! Por supuesto, Borromeo tiene que arreglarse de vez en cuando. Pero intenta combinar vestidos lujosos con joyas económicas. Así se siente más cómoda.
¿Quién crees que se merece más el título de icono del estilo: Meghan, Kate o Beatrice? ¡No dejes de escribir tu opinión en los comentarios!
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