Esta joven estaba buscando un marido rico usando los foros de citas en Internet. En su anuncio ella publicó lo siguiente:
«No voy a mentir para qué estoy aquí. Este año celebro mis 25 años. Soy muy atractiva, tengo buen gusto y sentido del estilo. Quiero casarme con un hombre que gane más de 500 mil dólares por año. Usted puede pensar que soy una persona ambiciosa y superficial. Pero no, no es así. Para que entienda: en Nueva York, él que gana un millón de dólares al año, se considera de la clase media. Y yo no quiero ser una mendiga.
Mis condiciones no son tan inalcanzables. ¿Habrá algún hombre en este sitio cuya renta anual sea de 500 mil dólares? ¿O ya todos ustedes estan casados? Otra preguntita más: “¿Qué tengo que hacer para casarme con un hombre rico como Usted?”
Todos los hombres que he conocido no ganan más de 250 mil dólares al año. Tal parece que este es el límite para mí. Por eso quisiera que me respondieran a algunas preguntas de mi interés. Por ejemplo:
1) ¿Dónde ustedes, los solteros ricos, generalmente pasan el rato? (Por favor escriban sus bares favoritos, restaurantes, gimnasios, preferiblemente con las direcciones).
2) ¿ Hombres de qué edad son más recomendables para conquistar?
3) ¿Por qué la mayoría de las esposas de los ricos son tan mal parecidas?
4) ¿Cómo saben ustedes cuál es la adecuada como mujer, y cuál es solamente para divertirse? El papel de la segunda no me interesa tanto como el de la futura esposa.
Espero ansiosamente por su respuesta…
Su Belleza».
El Director General de uno de los bancos más importantes de los Estados Unidos le contestó de esta manera:
«Distinguida Belleza!
He leído con gran interés su mensaje en el foro. Supongo que muchas chicas piensan de la misma manera. Permítame analizar esta situación en términos de inversión.
Mi ingreso anual es mayor de 500 mil dólares. Esto es exactamente lo que Usted busca. Por tanto, estoy seguro de que no estoy empleando el tiempo en vano. Como hombre de negocios, puedo decir que casarme con Usted sería una mala decisión. Es muy simple. Permíteme explicarle el por qué.
Lo que Usted está tratando de hacer es un trueque de «belleza» por «dinero», es decir, la entidad A ofrece su belleza, y el sujeto B paga por la mercancía. Parecería que no hay trucos sucios.
Pero a pesar de esto, hay un gran problema, y es que su belleza se desvanecerá con el tiempo, algo que de seguro no pasará con mi dinero, sin razones evidentes. En el futuro, mis ingresos probablemente se multipliquen, a diferencia de su belleza.
En términos económicos, somos – dos activos. Mi valor con el tiempo irá subiendo, mientras que el suyo – cayendo. Y además, de una manera exponencial.
Imagine nuestra relación como un acto comercial. Como en cualquier negociación en Wall Street, cada parte tiene su posición.
Si el precio de Usted, como activo en el mercado, ha caído, lo venderemos. Ya que para el futuro tener un activo así en el poder simplemente no tiene sentido. Lo mismo puede aplicarse a una boda, la que Usted tanto anhela. Por más cruel que suene, pero la solución más óptima para el problema de activos que se deprecian rápidamente, es su venta o alquiler.
Cualquier hombre que hace más de 500 mil dólares por año, a priori, no puede ser tonto. Claro está que los que son como yo, solo disfrutarán de su compañía, pero nunca se casarán con Usted. Mi consejo para Usted – no pierda más tiempo con estas búsquedas. Busque su propia manera de enriquecerse y ganar por sí misma tanto dinero en un año. Verá que entonces sus probabilidades de conocer a un rico tonto aumentarán considerablemente.
Espero que mis respuestas le sean de utilidad».
¡Absolutamente cierto! La belleza – no aquella envoltura multicolor perecedera, sino la verdadera belleza, la que se esconde en lo profundo del interior – esa nunca va a desaparecer – ni mañana, ni dentro de 50 años.
¡Comparte esta historia con tan bella moraleja con tus amigos!
Deje su opiñón sobre la publicación