Toda ama de casa sabe que mantener el orden en el hogar puede ser todo un reto. Esto es especialmente difícil para las mujeres que trabajan durante varias horas al día. Por regla general, la limpieza se lleva todo un fin de semana y no deja energía para unas vacaciones decentes. Así fue conmigo, hasta que una amiga mía me contó su fórmula secreta. Resulta que es más fácil mantener la limpieza que recrearla.
Hay reglas sencillas que facilitan el orden y reducen el tiempo que hay que emplear para lograrlo. Y en este artículo te lo contaremos todo.
Ordenar la casa: fácil y sencillo
Por supuesto, todavía tendrás que poner todo en orden. Pero ahora lograr este orden ya no te llevará tanto tiempo como antes. ¡Ya lo verás!
Regla nº 1: deshacerse de la basura
¿No te encanta coleccionar cosas por si las necesitas? Esa es la clase de basura de la que deberías deshacerte. Hay una regla de oro: si en un año no has necesitado una cosa, significa que en el futuro vivirás fácilmente sin ella.
Esa falda, con la que fuiste a una primera cita con tu marido, definitivamente no volverá a estar de moda. Y esa maceta con un agujero, tampoco la vas a arreglar. Lo mismo ocurre con una bolsa con el asa rota u otras cosas por el estilo.
Recuerda que trasladar esos trastos de un sitio a otro y quitarles el polvo te roba tiempo valioso. Además, las montañas de cosas sin usar contribuyen a la acumulación de energía negativa en el hogar e impiden los cambios positivos en la vida. ¿Quieres un nuevo trabajo? Entonces limpia tu armario de trastos.
Regla nº 2: esconder los zapatos nada más llegar
Lava tus zapatos nada más llegar a casa y ponlos en una estantería especial. De este modo, el polvo y la suciedad de la calle no se esparcirán por toda la casa. Además, la casa luce más ordenada cuando no se ven los zapatos en la puerta del pasillo.
Por cierto, los zapatos limpios facilitan mucho la preparación por la mañana. Si olvidas algo en la habitación, siempre puedes volver sin quitarte los zapatos. Esto ahorra tiempo.
Regla nº 3: planchar la ropa sin demora
Gracias a los avances tecnológicos, el proceso de lavado de la ropa requiere muy poco esfuerzo por parte de las amas de casa. Y eso deja más tiempo y esfuerzo para planchar. Pero algunas amas de casa siguen amontonando la ropa que necesitarán planchada. Es tedioso, lo sé.
Pero planchar tan pronto como la ropa esté seca ahorra tiempo. Créeme, es más rápido planchar unas cuantas sábanas a la vez y guardarlas en el armario que moverlas de un lado a otro, dejando el asunto para después.
Por cierto, la ropa ligeramente húmeda es mucho más fácil de planchar que la ropa largamente secada. Los tejidos ligeramente húmedos se planchan mejor y más rápido. Probado y comprobado.
Regla nº 4: Espolvorear con antiestático
Si sigues limpiando el polvo con un trapo húmedo normal, tienes que dejar el hábito. Esto hace que tu rutina de limpieza sea ineficaz porque el polvo ya resurge al día siguiente.
Debes utilizar un antiestático en las superficies para evitar que el polvo se deposite. Puedes hacer tu propio antiestático para estas superficies. Exprime 1 cucharadita de zumo de limón y la misma cantidad de aceite vegetal en un vaso de agua caliente y remueve bien. Empapa un trapo en esta solución antes de cada limpieza.
Se puede hacer un agente antiestático con un acondicionador de tejidos normal. Mezcla el acondicionador con el agua en una proporción de 1 : 3 y remueve. Cuando limpies, pasa un trapo por las superficies con esta mezcla para que el polvo no se deposite en ellas.
Nuestros consejos te ayudarán a limpiar con menos frecuencia y a mantener tu casa más limpia. Sin embargo, todavía hay algunas cosas que puedes tener que limpiar un poco más a menudo. No hay forma de evitarlo. Cuéntanos en los comentarios qué otros trucos utilizas para optimizar la limpieza del hogar. Estaremos encantados de conocerlos.
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