Esta historia es tan conmovedora, que parece un cuento de hadas de Cenicienta, donde una chica joven y frágil se encuentra con un hermoso príncipe. Sí, así es, hablamos de la Princesa Diana, la favorita de muchos, modesta, sincera, una persona extraordinaria. Lady Di, incluso después de su muerte, sigue siendo el ídolo de millones. La vida y la muerte de Diana están cubiertas con un manto de misterios, pero uno de ellos con suerte se pudo revelar.
Cuesta creer, pero en el lejano 1978, todos conocían a la princesa Diana como Diana Spencer. La chica, que simplemente adoraba a los niños, trabajaba en la guardería «Joven Inglaterra» en Pimlico. ¡Sí, así mismo fue!
La representante de una de las familias más antiguas de Inglaterra, Diana no renunciaba al trabajo y recibía sólo… $ 5 por hora. La señora Di cuidaba de los niños, paseaba con ellos y hacía tareas domésticas.
A finales de los 70, una empresaria estadounidense Mary Roberts, que vivía en Londres, necesitaba una niñera para su hijo Patrick, de un año de edad. La mujer llamó a la agencia local, y la única niñera disponible era Diana Spencer de 18 años.
Al hablar con la chica, Mary estaba feliz de ofrecerle trabajo… ¡a la futura esposa del príncipe Charles! Diana cuidaba del pequeño Patrick, limpiaba la casa e iba de compras al supermercado.
Al parecer, ¿para qué querría trabajar una mujer fina, rica y distinguida? ¿La muchacha de una familia noble, que residía en su propio apartamento en Londres, valorado en 100.000 libras, trabajaba como niñera? ¡Es incomprensible! Aparentemente, el amor de la señora Diana por los niños era increíblemente fuerte.
Un día, Mary encontró una colilla debajo del sofá en la sala de estar. Un tanto preocupada, la joven madre decidió averiguar más sobre la niñera de la agencia. ¡Cuán grande fue su asombro, cuando reconoció en la joven niñera a la señora Di, la representante de una de las familias más antiguas y respetadas de Inglaterra!
Tras conocer a Charles, recién convertida en princesa, Diana dejó su trabajo favorito, y pronto Mary Roberts la vio en las noticias: nada más ni nada menos, la boda del príncipe Charles y la princesa Diana.
Luego Diana dio a luz a sus propios hijos, pero pensar en los días cuando trabajaba con Maria, siempre le traía gratos recuerdos. Un día la princesa dijo que el tiempo que pasó trabajando en el hogar de Roberts era el más feliz en su vida.
Durante los siguientes 16 años, las mujeres se mantuvieron en contacto, por correspondencia. Sus estrechos lazos de amistad fueron confirmados, cuando Mary fue invitada al funeral de Lady Di en 1997.
Dos años más tarde, Mary Roberts escribió el libro «Diana, que conocí».
Este video está en inglés. ¡Si lo hablas, no dejes de ver la emocionante historia, contada por Mary Roberts!
La imagen de la princesa modesta y afectuosa permanecerá siempre en el corazón de la gente. «La vela en el viento» – la llamó Elton John a Diana en una de sus canciones. «Tu vela se apagó hace mucho tiempo, tu leyenda perdurará…»
Una mujer con un destino increíble, guerrera incansable, defensora de la gente sencilla, un verdadero ser humano, Diana descansa en el patrimonio de Spencers Eltorp en Northamptonshire, una isla pintoresca y aislada.
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