Los antiguos libros de texto soviéticos estaban llenos de rompecabezas que desarrollaban las habilidades lógicas de los alumnos, incluso más que los ejercicios habituales de matemáticas. Los profesores pensaban con cariño cada detalle de esos rompecabezas para mantener el interés de los niños. Hoy en día, los alumnos de nuestras escuelas se ven obligados en su mayoría a resolver problemas abstractos. Los maestros de la vieja escuela, en cambio, sabían cómo introducir un elemento lúdico en el proceso de aprendizaje. Y la imagen del puzzle de nuestro artículo de hoy es una confirmación perfecta de ello.
Puzzle con imágenes de los profesores de la vieja escuela
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La ilustración que verás a continuación se publicó por primera vez en una revista soviética a finales de los años 60. Los numerosos pequeños detalles que contiene así lo gritan. Para los alumnos modernos no es fácil enfrentarse a una tarea así. Por lo que este puzzle soviético resulta bien interesante.
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Puzzles soviéticos
Este es un piso medio de los viejos tiempos. El hijo y el padre que viven allí se ocupan de sus asuntos. Y tú y yo tenemos que determinar algunos datos sobre la familia a partir de la imagen del puzzle basándonos únicamente en la propia ilustración. ¿Estamos listos? Vamos allá. Mantén los ojos bien abiertos.
Los autores de la ilustración plantean al lector exactamente cinco preguntas. ¿En qué época del año está hecha la ilustración? Y para ser precisos, ¿de qué mes se trata? ¿Tiene la familia agua corriente en el piso? ¿Vive alguien más en el piso aparte del padre y el hijo? Por último, ¿cuál es la profesión del padre?
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Un minuto para pensar
Te damos un par de minutos para que pienses en las preguntas anteriores. Las respuestas empiezan en el siguiente párrafo, así que no te las saltes. Te aseguro que es posible responder a cada una de estas preguntas basándose únicamente en la ilustración.
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Así que, vamos allá. Todo se aclara enseguida con la época del año, si nos fijamos en el valenki y en la rejilla de ventilación de una cocina bien caldeada. Un calendario en la pared confirma que no es sólo invierno, sino diciembre. Por algo la última página del calendario está abierta.
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Respuestas sencillas
Fíjate bien en el lugar donde el hijo se lava las manos y verás que no hay agua corriente en el piso. La foto fue creada en los años sesenta, ¡hay que entenderlo! No hay duda de que en el piso vive una niña, si observamos las muñecas y los peluches que hay junto al sillón. Y el padre es médico. El estetoscopio y el martillo de reflejos lo demuestran.
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Hasta aquí la foto del puzzle. Como ves, todo está a la vista. Solo hace falta mucha observación para unir los hilos dispares. Y, sin embargo, esta imagen estaba destinada a los escolares.
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