Todas nuestras acciones están controladas en gran medida por el subconsciente. Esto se nota cuando hacemos algo automáticamente, sin pensar realmente en el proceso. Si miras de cerca la forma en que una persona realiza acciones de rutina, obtendrás mucha información interesante sobre ella. La prueba de la ducha, de la que hablamos en nuestro artículo de hoy, es muy divertida, a la vez que curiosa. Observa cómo se comporta tu propio cuerpo: ¿Qué parte de tu cuerpo prefieres lavarte primero en la ducha? ¡Aunque no lo creas, esta acción dirá mucho sobre ti!
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Cabello
Una persona que siempre comienza a lavarse el cabello de inmediato, es muy probable que sea puntual. Si lo primero que haces es arreglarte el cabello, de seguro estás acostumbrado a hacer todo en orden. Esto es lo que hacen las personas disciplinadas y seguras de sí mismas. Después de todo, no es de extrañar que cuando elogiamos a una persona inteligente y seria, a menudo decimos: «¡Guau, qué bien se ve tu cabello!».
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Cara
Si te lavas primero la cara durante la ducha, lo más probable es que estés preocupado por algo. Las personas que hacen esto, buscan poner en orden sus sentidos lo más rápido posible, para eliminar rápidamente el agua y el jabón como obstáculo para la percepción. Bueno, también quieren verse lo mejor posible a los ojos de los demás. Esta es la razón del cuidado minucioso del rostro.
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Cuello y hombros
Inconscientemente, asociamos estas partes del cuerpo con el trabajo. Las personas que primero se lavan el cuello son obligatorias, trabajadoras y propensas al perfeccionismo. Al igual que el mítico Atlas, a menudo cargan con un peso exorbitante sobre sus hombros. Este comportamiento también habla de mucha perseverancia: mientras otros disminuyen la velocidad frente a los obstáculos, ¡tú estás listo para seguir adelante para lograr tu objetivo!
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Pecho
Las personas abiertas y sin vergüenza innecesaria, comienzan a lavarse desde el pecho. Si lo primero que haces es enjabonarte el pecho, lo más probable es que seas una persona práctica y muy independiente. La opinión de otra persona apenas te molesta: puedes tenerla en cuenta, pero solo cuando realmente importa. Tal hábito no siempre indica cualidades de liderazgo, pero esas personas a menudo son respetadas universalmente.
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Espalda
La espalda en nuestra mente subconsciente está firmemente conectada con el concepto de punto vulnerable. Las personas que comienzan a lavarse por la espalda suelen ser solitarias y reservadas. Les resulta difícil confiar en los demás. Un cuchillo en la espalda para esas personas no es una metáfora, sino una amenaza muy real. ¡Pero es casi imposible engañar a tales individuos! Y realmente no necesitan la compañía. Esas personas se sienten bastante cómodas con su propia compañía.
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Brazos y piernas
Las personas que prestan atención a sus extremidades, generalmente se distinguen por una considerable resistencia. Si lo primero que haces es lavarte los pies, eso indica practicidad y modestia de carácter. Al tomar una decisión importante, lo más probable es que primero evalúes los pros y los contras, para luego nunca arrepentirte de la decisión. Bueno, si una persona comienza a lavarse las axilas de inmediato, ¡este paso indica la ausencia de miedo al trabajo duro y difícil!
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Lugares íntimos
Los introvertidos suelen empezar por lavarse sus lugares íntimos. Si haces esto, lo más probable es que seas muy tímido. Rara vez dejas que alguien se acerque a ti, pero estás listo para dar tu vida por tu familia y amigos. Aquellos que te conocen bien a menudo admiran tu sinceridad y amabilidad.
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Sí, esta prueba de la ducha es algo divertida. ¡Pero con demasiada frecuencia da en el blanco! Una cosa engañosa es el subconsciente… En mi caso, estas descripciones sí tuvieron coincidencias con mi carácter.
¿Y en tu caso? ¿Coincides con la prueba de la ducha? ¡Cuéntanoslo en los comentarios, danos un Me Gusta en Facebook y no olvides compartir esta publicación con las amistades de las redes sociales!
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