Muchas mujeres incluyen el lavado del cabello en su ritual diario para restaurar la belleza. Sin embargo, los tricólogos aseguran que este hábito puede causar un daño irreparable para la salud de la cabellera… Esto se debe a que el cabello no tiene capilares sanguíneos, por lo que solo se alimenta de una secreción especial, producida por las glándulas de la piel.
El lavado diario con champú, elimina esta capa protectora y nutritiva, por lo que el cabello se seca rápidamente, lo que lo convierte en quebradizo y deshidratado. ¡Este es uno de los motivos más comunes de la caspa!
¿Por qué el cabello se engrasa tan pronto?
Aunque no lo creas, incluso a quienes poseen un tipo de cabello graso, se les está contraindicado lavarlo frecuentemente, pues, al perder la capa protectora, las glándulas sebáceas comienzan a producir más grasa.
Para que el cabello no se quede sin grasa antes de tiempo, trata de seguir estos consejos de los expertos.
- Poco a poco, aumenta los intervalos entre el lavado de la cabeza. Cubre el cabello con una bolsa de nylon, o recógelo con una felpa. ¡Para no tener la tentación de utilizar un champú seco!
- Trata de tocarte el cabello cada vez menos, y hazte un nuevo peinado.
- Renuncia por un tiempo al uso de geles, espumas, lacas y otros productos para el peinado.
- Después de lavar el cabello, trata de enjuagarte cuidadosamente el champú. De lo contrario, corres el riesgo de verte los rizos grasientos por la noche.
- Siempre enjuágate el cabello por lo menos 2 veces. Usa el champú que sea ideal para tu tipo de cabello.
- Para lavarte el cabello, utiliza agua suave, a la que puedes adicionarle una pequeña cantidad de sodio.
- ¡Mantén un ojo en la temperatura del agua! Debe ser fresca, ya que, bajo la influencia de las altas temperaturas, las glándulas sebáceas comenzarán a trabajar de manera más activa.
- Al final del lavado del cabello, enjuágatelo con una decocción de manzanilla, tanaceto u ortiga.
- Tal vez, la razón de la rápida suciedad del cabello sea una dieta incorrecta. Trata de eliminar o reducir los alimentos que desencadenen la producción de sebo: alimentos grasos y fritos, azúcar y productos de panadería.
- Otro remedio natural para el lavado del cabello es el agua de limón. Para prepararlo, es suficiente mezclar el jugo de un limón y medio litro de agua fría.
¡Si sigues nuestros consejos durante un mes, notarás muy pronto los cambios! Eso sí, asegúrate siempre de consultar a un médico, pues la razón de la rápida contaminación del cabello podría deberse a alguna enfermedad oculta. Y no olvides deshacerse de la idea de lavarte el cabello con mucha frecuencia.
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