A veces, pienso que muchos delincuentes reciben un castigo demasiado suave por sus crímenes. Pero como dice el dicho: «La ley es dura, pero es la ley». Este evento tuvo lugar recientemente en Ohio, y es un claro ejemplo de que la ley también puede equivocarse….
Judy Malinowski, de 33 años de edad, ha pasado los últimos 16 meses de su vida, internada en un hospital. En agosto del 2015, la chica tuvo una fuerte pelea con su novio, Michael Slagerom, en una estación de servicio. ¡En el calor de la discusión, a Michael se le ocurrió la malévola idea de bañar a su novia con gasolina y prenderle fuego!
Debido a esto, Judy sufrió fuertes quemaduras, que abarcaron el 80% de su piel. Sus orejas simplemente desaparecieron, y los dedos de su mano izquierda tuvieron que ser amputados…
¡A pesar de la brutalidad de la infracción, el tribunal condenó a Michael Slagerom a solo 11 años de prisión! Como no hubo testigos del crimen, el hombre insistió en que no fue su intención prenderle fuego a su compañera, y que todo no fue más que una triste casualidad. Al parecer, él había dejado caer un cigarrillo sin querer…
La desafortunada chica no pudo dar pruebas del hecho a los tribunales, debido a que todo este tiempo estuvo muy cerca de la muerte. ¡Sólo después de 16 meses en el hospital, y de 51 operaciones reconstructivas, por fin pudo hablar!
La sentencia se dictó sin tomar en cuenta el testimonio de Judy. Cuando la chica se enteró del castigo impuesto por el tribunal, no lo pudo creer… «Yo nunca imaginé que este hombre pudiera ser tan malo. ¡Desde una mesa cercana, él observó cómo me quemaba, y no hizo nada!», – comentó Judy.
A pesar de algunos progresos en el tratamiento, la situación de la chica sigue siendo muy crítica. Como debe permanecer boca abajo, pues su espalda y trasero están en muy mal estado, Judy tiene que estar permanentemente conectada a un equipo de ventilación pulmonar artificial, sin el cual se asfixiaría. Los médicos no son muy optimistas con su estado, y creen que sus posibilidades de supervivencia son muy bajas…
Su historia despertó la conciencia de muchas personas, quienes se han unido en pos del objetivo de modificar la legislación vigente. La demanda es que crímenes como este reciban su justo castigo.
Espero sinceramente que Judy logre superar esta dura prueba, y el causante de su tragedia reciba su merecido. Comparte esta historia con tus amigos y conocidos. ¡Ayudemos a que la ley cumpla su cometido ante este tipo de incidentes, y caiga con todo su peso sobre quien lo merezca!
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