Por lo general, las personas adultas somos los que nos encargamos de cuidar a nuestros hijos, protegiéndolos de los peligros de la vida. Sin embargo, a veces, la vida invierte esta situación, y son los pequeños angelitos que nos dan importantes lecciones, e incluso, nos rescatan de más de una situación complicada.
La pequeña Alison Anderwald, de Texas, es un claro ejemplo de ello. Con tan sólo 5 años de edad, ha demostrado un autocontrol y fuerza de voluntad extraordinarias. Hace algunos días, la niña y su madre decidieron tomar un baño en la piscina, situada en el patio trasero.
La pequeña ya había salido del agua, cuando, al mirar atrás, vio que su madre se estaba ahogando. La mayoría de sus coetáneos se habrían confundido o correrían a buscar ayuda, pero Alison actuó diferente. Ella se dirigió inmediatamente hacia su madre y la arrastró, sin demora, hasta el borde de la piscina, donde el agua es poco profunda. Todo el incidente fue grabado por las cámaras de seguridad de la casa de la hermana de Tracy.
Acto seguido, la pequeña se aseguró de que la cabeza de la madre estuviera por encima del agua, y sólo entonces comenzó a llamar, pidiendo ayuda. La madre de Alison, Tracy, recuperó el conocimiento ya en el hospital. Los médicos confirmaron que la causa de la emergencia fue un infarto de miocardio. ¡Si no fuera por la acción oportuna de su hija, la mujer probablemente habría perdido su vida!
Alison aprendió a nadar cuando, apenas, tenía tres años. Los padres responsables se aseguraron de que su bebé aprendiera todos los conocimientos necesarios sobre la seguridad en el agua. No podían ni imaginar en aquel entonces que tan sabia decisión, luego de dos años, le salvaría la vida de Tracy. Hoy en día, la vida de la mujer está fuera del peligro, ¡y todo gracias a su valiente y decidida hija!
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