Cuando limpiamos la cocina, siempre hay que prestar atención a la estufa. Siempre quedan rastros de comida, manchas. Por lo general, quitamos la rejilla de la estufa, lavamos la superficie y luego volvemos a colocar la rejilla. Por lo tanto, la grasa, el hollín y otros contaminantes se acumulan durante meses o incluso años en ella.
Al final, la rejilla está cubierta con una capa pegajosa negra que, al parecer, no se puede lavar. Pero ese no es el caso en absoluto. No necesitarás costosos descalcificadores ni horas de trabajo con esponjas de hierro. ¡Resulta que puedes limpiar la rejilla de la estufa con un ligero movimiento!
CÓMO LIMPIAR FÁCILMENTE LA REJILLA DE LA ESTUFA SIN PROBLEMAS
Necesitarás:
- Amoníaco
- Paquetes
Limpieza de la rejilla
1. Pon la rejilla de la estufa en una bolsa que quepa. También puedes utilizar bolsas con cierre hermético.
2. Directamente dentro del paquete, rosea con amoníaco.
3. Ata bien la bolsa. Ponle algunas bolsas más y átalas también. Deja la rejilla toda la noche.
4. Por la mañana, los trozos de grasa y hollín se pueden eliminar con una esponja de cocina común o incluso con un chorro de agua corriente.
El amoníaco es un gran ayudante para limpiar la rejilla de la estufa. Hace frente al hollín no solo por el líquido en sí, sino también por su evaporación. Es por eso que la boca de las bolsas debe estar bien atada. Por cierto, de esta manera también puedes limpiar la rejilla de la parrilla.
¿Te ha resultado interesante y útil lo leído en nuestro artículo? ¿Cómo está la rejilla de tu estufa? Escríbenos en los comentarios cómo afrontas este problema en casa y si decides probar con este método, escríbenos tus resultados. Danos un Me Gusta y comparte con las amistades de las redes sociales este post y sobre todo tu opinión; sin dudas ayudará a enriquecer nuestro trabajo.
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