El 6 de abril de 2013, Andrew y Amanda Hanson estaban extremadamente felices. No es para menos, su hijito primogénito estaba por nacer. Le iban a poner el nombre de Clayton. Sarah Ledford, la fotógrafa, estaba allí para capturar los felices primeros momentos de la vida del bebé…
Pero sucedió lo inesperado… Inmediatamente después del nacimiento del bebé, Amanda entendió que algo estaba mal. En la sala reinaba el silencio de muerte. El niño no lloró … La fotógrafa Sarah Ledford recuerda que la habitación comenzó a llenarse rápidamente de los médicos que, por un momento, incluso, lograron traerle de vuelta a la vida al bebé, pero los esfuerzos fueron vanos…
Tres meses después, Amanda y Andrew recibieron una sorpresa muy agradable. Resultó que la mujer está embarazada de nuevo. No cabe duda que se sintieron extremadamente felices, pero luego, se dieron cuenta de que en menos de un año, estarían de regreso en la misma sala de partos, en la que han perdido a su hijo.
Chicos volvieron a llamar a Sarah, y el parto atendió el mismo médico. Esta vez, al mundo llegó un niño sano, que fue nombrado Carson. Todos los presentes en el momento de su nacimiento, recuerdan cuán preocupado estaba el médico. Para él era extremadamente importante traer, finalmente, la felicidad a esta adolorida familia.
¡La vida es vencedora! Admito que esta conmovedora historia me ha dejado con lágrimas en los ojos… Deseamos sinceramente que ahora esta familia esté bien.
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